La quinua fue un alimento básico para nuestros abuelos y abuelas en las zonas andinas. Los cañaris antes de la llegada de los españoles -y por ende de los cereales- la tenían como su preferida. La quinua apareció en el Ecuador entre los 300 y 500 a.c. fue domesticada también en Bolivia y se dice que en el lago Titicaca, la quinua nació en el mundo hace 7 mil años atrás.
En este mes quisimos reflexionar sobre nuestra relación con la quinua ya que no siempre ha sido la favorita en las mesas. En los años 70´s su existencia se amenazó en tierras como el Ecuador.
En nuestra historia, recetas, en nuestra familia ¿qué tanto aparece la quinua?
En el mes de enero hicimos una encuesta donde la mitad menciona comer quinua más de una vez a la semana, y el más distante tres veces al mes.
¿y qué se prepara? La imaginación resaltó quinua con: verduras, arroz, carne, en sopa. Tambien para la mañana en batidos, coladita, hecho tortillas, pastel o galletas. En ensalada y hasta solita, asi nomás con sal.
El conocimiento de este tipo de comidas según las respuestas, fue aprendido principalmente en la familia, pero también con amigos, recetas compartidas o en internet y hasta en la universidad. Por ahí no faltó el inventor que logró “algo” con lo que tenia a la mano.
Para complementar el gusto actual por la quinua, por los que aun tienen duda de explorar su sabor, no olviden que este super alimento brinda 16 gramos de proteínas por cada 100 gramos, 15 gramos de fibra y alrededor de 6 gramos de grasas (en su mayoría insaturadas) destacando ácidos omega 6 y omega 3. Las hojas de la planta por cierto, son dulces y se usaban en platillos
Si quieres revertir el estreñimiento, adelgazar, si tienes diabetes; si vas a caminar largas distancias o si tienes hijos, este pseudo cereal es perfecto para ti.
Texto: Karenina Casarín
Fotos: shuterstock