Estuvimos presentes en el panel de Agrobiodiversidad, semillas y agroecología. Un espacio de debate sobre diferentes formas de ver el desarrollo en el Ecuador. En el panel pudimos escuchar a representantes de la Conferencia Plurinacional de Soberanía Alimentaria, del INIAP, de la FEINE y el Asambleísta Pedro de la Cruz.
Fue interesante ver la presencia de compañeros de la campaña por el consumo responsable ¡Qué rico es comer sano y de mi tierra! en este panel. A ellos les preguntamos sobre la relación que tiene la agrobiodiversidad y los consumidores. Esto fue lo que nos contaron.
La revolución verde se impuso en el agro ecuatoriano con la introducción de una nueva forma de cultivar: monocultivos (grandes extensiones de terreno sembrado por un solo cultivo), uso de fertilizantes, pesticidas y fungicidas. La idea era producir de forma masiva y exportar.
La revolución verde desplazó a otra forma de agricultura que principalmente cuidaba la agrobiodiversidad. En los últimos años hemos sido testigos de cómo el movimiento agroecológico toma fuerza y presencia en diferentes espacios. Por una parte, en el campo comienza a existir una producción limpia, y por otro lado, en las ciudades crece la demanda de productos sanos.
Crecen los espacios de comercialización, de encuentro entre el campo y la ciudad, pero también crece la participación de consumidores y agricultores en espacios políticos, donde se discute el modelo de desarrollo.